Noticias cortas: el hundimiento del Titanic en 1912

El transatlántico británico de lujo Titanic en su viaje inaugural desde Liverpool hasta la ciudad de Nueva York, chocó contra un iceberg poco antes de la medianoche del 14 de abril de 1912. De las más de 2.220 personas que viajaban a bordo, sólo  707 sobrevivieron.

Este barco constituía el objeto móvil más grande construído por el hombre hasta la fecha.

 

El hundimiento del Titanic constituyó una de las peores catástrofes marítimas de la historia.

El barco había sido considerado insumergible debido a su construcción con dieciseis compartimentos estancos, pero el iceberg perforó cinco de ellos, uno más de los que se habían estimado posibles en caso de accidente, por lo que el Titanic se hundió en menos de tres horas.

Posteriores investigaciones determinaron que el barco había estado navegando demasiado rápido en aguas peligrosas, que sólo se habían previsto botes salvavidas para la mitad de los pasajeros y la tripulación y, que el barco Californian, cercano al lugar del hundimiento, no había acudido al rescate porque su operador de radio estaba dormido.

Estos hechos motivaron muchas reformas, tales como la provisión de espacio para los botes salvavidas para cada persona que viajara en un barco y de chalecos salvavidas, los turnos de guardia de radio durante todo el día mientras se navega y una vigilancia internacional del desplazamiento de los hielos polares.

La película "Titanic"  de James Cameron (USA, 1997) nos hace "vivir" el Titanic y su catastrófico final, pero cabe tener en cuenta que se trata de una película y no una reconstrucción real. Vale la pena la aclaración para no tomarla tan en serio y creer que lo que en ella se cuenta fue como verdaderamente ocurrió: muchos aspectos son tratados con la lógica libertad artística para generar un mayor dramatismo, y no tienen por qué tener una correlación con la realidad. Por ejemplo: no está demostrado que se encerrase a pasajeros de tercera clase en áreas contra su voluntad; o en la película se muestra como en menos de 40 segundos desaceleran, frenan, invierten y llegan a máxima potencia hacia atrás para evitar el impacto, cuando los motores de ese tipo de trasatlántico necesitaba más de un minuto tan sólo para pararse. Muchas veces lo que ocurre en la realidad no funciona dramáticamente tan bien como estos detalles que se incluyen en un guión.